El día de ayer La Oficina de Estadísticas Laborales de los Estados Unidos publicó los datos inflacionarios correspondientes al mes de marzo, dando cuenta de un incremento anual de 5.0% en el nivel de precios y una variación mensual de 0.1%, con ambas mediciones encontrándose levemente por debajo de lo esperado por el mercado (5.1% y 0.2% respectivamente). De esta forma, y con una caída de un punto porcentual respecto al dato de febrero, el Índice de Precios al Consumidor continúa por noveno mes consecutivo su tendencia a la baja, fuertemente influenciado por la evolución favorable en el precio de los combustibles.
A pesar de lo anterior, la inflación subyacente, que es aquella que excluye los precios más volátiles (en particular, combustibles y alimentos), se ubicó en 5.6%, y si bien se encontró en línea con lo esperado, registró su primer incremento desde el máximo alcanzado en septiembre de 2022. Este comportamiento se explica principalmente por los incrementos en la división de vivienda, que acumula un crecimiento anual de 8.2% y continúa siendo la principal influencia en el crecimiento de la inflación.
¿Cómo reaccionó el mercado?
La reacción inicial de los principales índices accionarios de Estados Unidos fue positiva, con incrementos entorno al 1.0% en los futuros del S&P, y alzas algo más elevadas en los futuros del Nasdaq, caracterizado por el peso importante del sector tecnológico.
En la renta fija, la buena noticia inflacionaria empuja los rendimientos de los bonos soberanos de Estados Unidos a la baja, con la tasa a 10 años ubicada en niveles cercanos al 3.35%. Por otra parte, las expectativas respecto a la política monetaria de la Reserva Federal se mantienen relativamente inalteradas, con los mercados esperando una última suba de 25 puntos básicos en la reunión de principios de mayo.
A pesar de la clara tendencia a la baja que se continúa observando en el índice general de precios, la aceleración en la inflación subyacente nos lleva a mantener nuestra cautela, esperando un alza de 25pbs en la reunión de mayo, y una continuidad en el tono restrictivo de la FED. En línea con lo anterior, continuamos prefiriendo para la renta fija activos soberanos y duraciones algo más cortas. Dentro de los activos de crédito y acorde a este posicionamiento más defensivo, continuamos con nuestra preferencia por los instrumentos de mejor calidad crediticia.
Desde SURA Investment Management mantenemos un constante monitoreo de la situación y comunicaremos de forma oportuna actualizaciones o eventuales cambios en la estrategia.